Siempre he conservado una madre de Mango (variedad híbrida de skunk con olor y sabor a frutas tropicales), desde que comencé con el cultivo profesional, pues en mi opinión es una de las mejores plantas a nivel de clonado comercial. Produce gran cantidad de clones viables en todas las ramificaciones, dando lugar a gran cantidad de esquejes robustos y resistentes. El índice de supervivencia está siempre por encima del 95%.

Aunque    la    selección    de    un    macho    comercial, para mejorar la variedad mediante cruces “endogámicos”(IBL), ha sido uno de los grandes logros de nuestro equipo de desarrollo de variedades (breeding  team).  El  resultado,  una  Skunk-Mango con la floración tardía. Para adaptar los tiempos de floración  al  cultivo  de  interior,  decidimos  cruzarle  con nuestro macho afgano de Mazar que, además, le aporta un extra en la producción. El resultado es un cruce que sorprende a todos los cultivadores que la han testado. Es una de esas plantas que fabrican flores de gran tamaño a lo largo de todos los tallos que produce.

Es bastante sensible a niveles altos de EC y a la saturación de raíces, durante el crecimiento vegetativo. En floración, en cambio, puedes alcanzar altos niveles de EC: hasta 2,4 con sustrato de fibra de coco y hasta 2,8 en sistemas hidropónicos, sin miedo a bloquear las raíces. Aunque debes hacer lavado de raí- ces semanalmente. Recomiendo el uso de melazas (o hidratos de carbono) para el aumento de los niveles de azúcares brix, que son los responsables del sabor, el olor y producción de tricomas de calidad.

En exterior, esta variedad tiende a superar los 3 metros de altura, pero es muy fácil de tutorar y hacer SCROG, ocupando varios metros cuadrados de superficie. Al llevar una gran carga genética afgana, esta variedad queda lista en la última semana de septiembre. Conviene dejarla una semana más para una correcta maduración. En interior estará lista para cortar en 9 semanas (65 días).

Debes de tener en cuenta que esta variedad es pro- ductora de grandes y compactas flores, por lo que es importante que mantengas la humedad de tu sala de cultivo por debajo del 40% durante la fase de floración, para evitar la aparición de hongos como el chancro, botrytis o el oidio.

El olor en fresco es a mango ácido y en combustión, una mezcla de frutas tropicales con un toque almizclado. Los cogollos, al final de floración, tienen unos colores que recuerda la piel del mango.